Hacer la masa
Añadir la leche y la levadura en un bol y remover para mezclar.
Dejar reposar durante 5 minutos.

Montar el gancho de amasar.
Añadir al bol la mantequilla, la vainilla, la harina normal, la harina blanca de pan de fuerza, el azúcar, la sal y el huevo.
Mezclar durante 1 minuto a velocidad Min, hasta que empiece a formarse una masa.
Pasar la masa a una superficie de trabajo.
Amasar durante unos 7 minutos, hasta obtener una masa lisa y elástica.
Volver a colocar la masa en el bol y cúbrala con un paño de cocina.
Dejar reposar durante 1 hora y 15 minutos, hasta que duplique su tamaño.

Hacer el relleno
Colocar la masa sobre una superficie de trabajo ligeramente enharinada.
Estirar formando un rectángulo de unos 5 mm de grosor.
Esparcir una fina capa de polvo de frambuesa liofilizado sobre la masa.
Doblar la masa por la mitad, cubriendo el polvo.
Volver a doblar por la mitad y formar una bola con la masa.
Estirar con un rodillo hasta obtener un rectángulo de unos 5 mm de grosor.
A continuación, extender mermelada sobre la masa, dejando un espacio de 1 cm alrededor del borde.
Cubrir con frambuesas trituradas.
A partir de un borde largo, enrollar la masa en espiral.
Cortar la masa en trozos de 3 cm.
Colocar los rollos en una fuente de horno dejando un espacio de 1 cm alrededor de cada rollo.
Cubrir con un paño de cocina.
Dejar reposar durante 30 minutos hasta que doblen su tamaño.

Precalentar el horno a 180ºC.
Hornear los panecillos durante 20-25 minutos a 180ºC, hasta que estén dorados.
Sacar del horno y dejar enfriar.

Hacer el glaseado
Echar el azúcar glas en un bol pequeño.
Añadir agua y unas gotas de colorante rosa.
Consejo: Añadir agua suficiente para obtener un glaseado espeso que pueda lloviznar.
Mezclar bien.
Rociar el glaseado sobre los bollos.

Servir.